Para
poder hacer frente a la vida debemos tener buenos principios, que nos permitan
poder llevar acabo lo que nos proponemos.
Una
de las definiciones de la Real Academia
Española para definir principio es: “Base, origen razón fundamental sobre la
cual se produce discurrimiento en cualquier materia”
Al
tratarse del campo de la orientación educativa diferentes autores como Repetto,
2002; Santana, 2003, Bisquerra, 1998; Martínez, 1998, en Ruíz (2009) , coinciden al indicar como
básicos a los siguientes principios:
*Principio
de prevención.
*Principio
de desarrollo.
*Principio de intervención
comunitaria.
Ruiz (2009), coincide con
Rodríguez et al. (1993) y con Álvarez Rojo (1994) al incluir a los anteriores
tres principios, un cuarto el principio antropológico.
El
principio antropológico: este principio hace referencia a las preguntas que se
hace el profesional de la orientación del ser humano. Entre las cuales
aparecen: ¿Quién soy? , ¿Qué hago aquí?, ¿Qué sentido tiene mi existencia? ,
¿Qué tipo de persona pretendemos que
llegue a ser el individuo que estamos orientando?, ¿Cuáles son las
características del proceso de convertirse en persona?, ¿Cuáles son las
competencias de la orientación en este proceso? .Depende del tipo de respuestas que les demos a estos
cuestionamientos para situarnos ante la vida y ante la manera de cómo se
actuara como orientador , esto condicionara la forma en que se eduque y enseñe
a los estudiantes y al profesorado con respecto a su propia vida. Por ello es
importante trabajar de forma correcta el concepto de autoestima, la revisión
del proyecto de vida y la búsqueda de sentido. Frankl (2004) en Ruíz (2009).
-El
principio de prevención: este hace referencia a intervenir antes de que se
surja el hecho conflictivo, esta actuación anticipada puede ser hecha en
cualquier ámbito de la vida, esto con el objetivo de evitar que surjan
problemas. Se hablan de tres tipos de prevención:
*Prevención
primaria: actúa antes de que surja el problema.
*Prevención
secundaria: actúa en cuanto aparece el problema.
*Prevención
terciaria: actúa ofreciendo tratamiento y rehabilitación ante el problema ya
desarrollado.
La
prevención primaria, que es la auténtica prevención, Conyne (1983)
caracterizaba por:
*Ser
proactiva.
*Se
centra en poblaciones de riesgo.
*Reduce
la incidencia de una situación.
*Elimina
circunstancias o modifica condiciones ambientales.
*La
intervención puede ser directa o indirecta.
*Estimula
la fortaleza emocional para que la persona sepa afrontar situaciones que
conllevan riesgo.
Para
llevar a cabo este principio es necesario tener estrategias de trabajo para las
alumnas y alumnos, y sumado a esto los profesores padres de familia o tutores,
la comunidad.
-Principio
de desarrollo.
No
podemos olvidar que la orientación se incardina en el seno de la educación y
que esta persigue la optimización del sujeto, mediante el pleno desarrollo de
todas las capacidades humanas.
Resulta
sumamente enriquecedor considerar que ningún ser humano tiene límites en su
desarrollo, que cada uno puede llegar a desarrollar capacidades que, en un principio, parecen inimaginables.
Tanto el educando, como para el educador esta perspectiva arroja luz, esperanza
e ilusión a la labor formativa. Ruíz (2009).
La
educación es un medio para el de los individuos y de la sociedad en su
conjunto, es una palanca de progreso que debe ser activada en el seno familiar
y en escolar, principalmente. Ruíz (2009).
(…)
no se trata solo de desarrollar a la persona como ser individual, a fin de que
consiga el nivel óptimo de sus capacidades (cognitivas, afectivas, conductuales…)
sino también de educarla para una participación activa en el grupo social.
-Principio
de intervención social.
Los
enfoques sistémico- ecológico ponen de manifiesto que la eficacia de los
programas de intervención resulten eficaces, es necesario tener en cuenta los
contextos escolares y extraescolares en los que se desenvuelve la vida de los
destinatarios de dichos programas.
La
comunidad puede contribuir a mejorar la calidad de la educación. Para ello es
preciso abrir las puertas del centro educativo y permitir que los miembros de
aquella participen del proceso educativo.
-Objetivos.
Los
objetivos son el marco de referencia y la ayuda para desarrollar con mayor
calidad y eficiencia el proceso educativo. Zabalza, (1991: 90) en Ruíz (2009).
Rodríguez
Moreno (1995: 12) en Ruíz (2009), tras analizar una gran variedad de textos
sobre orientación, recoge los que podrían ser objetivos generales de la misma.
En su listado observamos la importancia que tiene el desarrollo personal:
-Desarrollar
al máximo la personalidad.
-Conseguir
la autoorientación y aceptación de uno mismo.
-Alcanzar
madurez para la toma de decisiones educativas y vocacionales.
-Lograr
la adaptación y el ajuste.
-Conseguir
un aprendizaje óptimo en los años de la escolaridad.
-Combinaciones
de cualquiera de los puntos anteriores.
Funciones.
Morrill,
Oetting y Hurst (1974) citado por Bisquerra (1988:47) en Ruíz (2009), destacan
tres categorías de la intervención:
A. Objetivo
de la intervención: a quién se dirige la acción orientadora:
1.
Individuo: los clientes son atendidos individualmente.
2.
Grupos primarios: familia, pareja, amigos íntimos.
3.
Grupos asociativos: clase, claustro, compañeros, clubes.
4.
Instituciones o comunidades: Centro, barrio, ciudad.
B. Finalidad
de la intervención: según ésta distinguimos tres tipos:
Terapéutica:
intervención en las dificultades en la relación interpersonal y social, desde
una perspectiva remedial o correctiva.
2.
Preventiva: intervención con objeto de evitar problemas futuros.
3. De
desarrollo: intervención para optimizar el crecimiento personal en todos los
aspectos.
C.
Métodos de intervención: dependiendo de cómo se realice la intervención:
1.
Intervención directa relación directa en
el sujeto (vis a vis)
2.
Consulta y formación: medios con los que
se puede ´influir en la población, ya sean directos o indirectos y, por tanto ,
a través de profesionales y para profesionales a fines.
3.
Medios tecnológicos: tecnologías que permiten mejorar y extender la influencia
de la orientación.
Bibliografía
: Ruíz , M.L.(2009). Principios,
objetivos y funciones de la orientación e intervención psicopedagogía. Castelló
de la Plana: Publicaciones de la Universitat Jaume I.
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